septiembre 29, 2012

Memoria del Sol

Como si la inmensidad pudiera contenerse entre cuatro rectas no infinitas y, aún así, la profundidad pudiera ser eterna, su mirada lo explica todo porque en ella está el mar y su marea, y en ella su mirada y en ella su persona. No podemos verla y eso es lo que nos trae tanto misterio y nos atrae porque sabemos lo que ve pero no sabemos que dicen sus ojos. Su piel, en cambio, nos habla del Sol... el Sol que es ella misma porque ella es el Sol.
Sus pies en las piedras se aferran al mundo, el color de sus ojos será por siempre un enigma pero si reflejan las aguas son del color del cielo que antes se reflejaron en las olas...
Un poco de bruma nos da la idea de confusión pero su dorada belleza -la de su cuerpo, la de sus cabellos, la de sus ojos si miran la luz- nos cuenta que está llena de paz, que ese es su lugar y que no existe tanto misterio, sino la dócil y liviana tranquilidad de saber que enfrente está el mar, por siempre... sino es en sus ojos, será en su memoria... la memoria del Sol.

septiembre 26, 2012

Poliedros


Cierta profundidad había aparecido en tus ojos, una profundidad que invitaba a quedarse. Algo imantaba mi corazón de hojalata, la versión exacta de un sentir que no había existido antes pero que viviría por siempre, y un poco más.

La repetición de la imagen era como un octógono o un dodecaedro de espejos en donde siempre tu atención repetida era mi inspiración comedida pero audaz, interesada en amar o morir. (Morir es siempre la opción segura) porque aún después de amar, morimos. Y se puede morir sin amar y hay cosas peores, se puede morir amando y morir de amor.

Y, a veces, hasta los espejos se equivocan y la inspiración falla...





Julio 2011 -    Sin astros que dejar...

septiembre 23, 2012

Dos años

Y hoy, precisamente hoy, cumple 2 años un blog que parece que tuviera 10 años o 30... o todos esos años adentro... Un blog que nació a pedido, a pedido de alguien que leía y extrañaba leer, que le pidió peras al olmo, un Olmo que ya no tenía inspiración y que encontró una canción vieja y luego soñó por primera vez y de a poco se fue metiendo adentro de este ejercicio infinito en donde se plasman las tristezas, los hechos únicos, los hechos inolvidables, las sonrisas y las lágrimas, el beso más lindo y el abrazo más fuerte, los amigos, la familia, los nuevos miembros y los sueños y los recuerdos que nunca más se irán. Y en donde también se atesoran los desencuentros y la nostalgia de los ojos y las sonrisas más inquietantes que haya podido conocer, en donde se esconde el misterio y la desilusión, la verdad y la mentira, la imaginación y la confianza, sobre todo la confianza en que el amor y la igualdad siguen siendo todavía  los dos mejores sentimientos del mundo... y la música el complemento imprescindible.

La visita a mis sueños

Eran mis brazos alrededor de tu cintura y vos sentada sobre mis piernas, esa foto conocida... mirábamos televisión pero no la veíamos, recuerdo el sonido y no la imagen. Me contabas de algún lugar en Buenos Aires, me contabas sobre una botella de whisky y un conductor nocturno... un auto fuera de control y yo te hice una pregunta, me contestaste y no entendí y entonces te pregunté de nuevo, acercando el oído para escuchar mejor... vos también te acercaste, apoyaste tus labios en mi oreja, susurraste algo y yo abrí los ojos, en el sueño y en la cama... me desperté y la tele estaba prendida, vi la hora: las 6 de la mañana de un Domingo... apagué la tele, miré a los costados, no estás... me vuelvo a dormir, a ver si te encuentro de nuevo y descubro qué fue lo que dijiste.. en la visita a mis sueños.

septiembre 20, 2012

Un compositor onírico

Ojos grandes en la irresoluble oscuridad de este cuarto resuelta por la luz de la lámpara en su cabeza, que toma un poco de las estrellas y que quita un poco de la Luna, si es que está. 
En silencio y en puntas de pies escabulle su existencia aferrando con fuerza entre sus sienes los acordes que acaba de soñar... se habrá soñado más alto, menos flaco, más algo más, menos algo menos... pero es él, sin dudas. 
No hay tiempo para dejar pasar el sueño está ahí y hay que desovillarlo, que deje de sueño y sea canción. Aunque nunca distingue muy bien entre los sueños y las canciones... Las canciones son eso que canta y los sueños... los sueños son una canción, para el compositor onírico, ese que canta que sueña, que sueña que canta, que duerme en canciones, que despierta en sueños, cantando, onírico, compositor... soñador.

septiembre 18, 2012

Equilibrio

Un extraño suceso, diferente
contrapuesto y más que cierto
despertando bajo mis pies
una pretérita confusión
resuelta en un instante
pero después de todo el tiempo
todo el que pueda recordar.

Basta con apenas abrir la ventana
saber que salió el sol
sopla un poco de viento
(pero no es por siempre)
ha llegado, ya está acá.

No avisa que llegó
ni por cuanto se quedará...
pero llegó...
el equilibrio.


septiembre 10, 2012

Es una canción

Es una canción para caminar cuando el sol cayó y el viento congela tus manos en mis bolsillos, desde algún punto de este planeta imposible. Y por algo suena así... por el frío o por el silencio alrededor.

Es una canción como para apretar las manos y respirar profundo, acompañando todo con una sonrisa, impostada pero presente, sugerente pero llena de sinceridad o con un atisbo fresco de felicidad.

O es una canción para esperar que el tiempo no pase sin sentido o sin querer. Una mano que detiene la fuerza de gravedad y la rotación de la Tierra.

Es una canción para cerrar los ojos y encontrarse con que esto está pasando... ahora mismo y en este lugar... y nunca mas abrirlos...

Es una canción que suena...

septiembre 05, 2012

La Nostalgia

Habrán tenido la magia y la certeza mejores noches y mejores compañías... Aunque en realidad no lo sé, nunca sé, ni me preocupo mucho en saber, hasta que pierdo toda oportunidad de lograrlo... Y la intriga e inquietud me agobian... Y solo confío, luego temo, más tarde me pregunto, me cuestiono, me culpo y vuelvo a confiar... Una sensación de ciclotimia...

Encontré en otro lado ciclotimia, pero menos cíclica... Un poco de sed de oídos que escuchen gritar... En silencio... Odio que sale de las manos, y entra por los ojos. Un rostro sosegado, descansado... y una sonrisa que amaga resurgir, no rauda, sino complaciente... Como buscando mostrar el lado renegado y el plácido sentir de alguna entraña que no estalla junto a las demás...

Explicar no es algo que en su tiempo se permita, pero retrucar es el juego preferido, siempre hay algo que contestar... Primero desconfiar, luego releer, y finalmente volver a recordar que no es tan malo quien lo dice, sino quien ya lo ha dicho, el que nos quitó las verdades y hace que veamos al veraz como un repetidor de mentiras, que fueron verdades al escuchar a un mentiroso...

Como sea, todo sol, brille donde brille, estará enviando el mismo calor, está en la piel de cada uno recibirlo o resistirlo... Está en la piel de cada uno, permitirse ser permeable una vez mas, jurando ser la última, queriendo ser la última, sabiendo ser una más... Una futura pena, el próximo dolor, la desazón venidera...

Y todos los que sienten eso odiarían hacérselo sentir al que luego provocará esa sensación, ese sentimiento en el que se cuida de lastimar y decepcionar...

Porque los próximos cinco minutos no evitarán que los anteriores mil hayan existido y lo que se ha dicho y escuchado no dejará de existir mientras haya alguien que lo recuerde...

Y los recuerdos son el último segundo vivido y contando para atrás... Los que nunca se revivirán... Los débiles siempre gastan los próximos cinco segundos en intentar recordar los anteriores, buscando encontrar dónde estuvo lo que desencadeno tanta nostalgia y melancolía...

No se quién soy para hablar en tercera persona...

septiembre 02, 2012

Sin querer

Puedo tomarte de la mano, quizás eso te haga sentir seguro, protegido. Puedo abrazarte y podrías pensar que es suficiente, pero en esta terrible situación, a solas con tus sentimientos, puedo mirarte y decirte que todo es normal, que todo es entendible y que pronto todo estará bien... y tal vez te esté mintiendo, sin querer mentirte, sin poder salvarte.