marzo 04, 2013

Escena

En estas tardes que no se parecen a aquellas tardes apenas la luz entra por la ventana y esas cortinas cerradas. Hace calor acá dentro y es que no podemos rodearte de frío. Contamos con todo el silencio que nos permite esta tele y los vecinos de cuarto. Yo leo mi libro, vos dormís tranquilo y de reojo te miro. Ya estuvimos en estas tantas veces pero antes hablábamos más.
Con cada hoja que paso saco una cuenta y después dejo de pensar, los pensamientos no ayudan y pedís agua. Tomás un poco y con cara de dolor volvés a dormir. Yo saco otra cuenta, anoto algo y sigo leyendo. Miro de reojo la pantalla y sigo adelante, el libro se va a terminar antes que se haga la hora.
Una ráfaga de tos irrumpe en tu pecho y dejo el libro en la silla, me paro y te miro, te pregunto y entiendo que no hay respuesta. Empiezo a manotear cosas y te las ofrezco, no doy en la tecla... me resigno y espero... Finalmente termina y entonces abrís los ojos y me mirás y te miro... te lleva unos segundos ubicar la escena... y entonces con no poca dificultad, me preguntás atento: "¿jugaste este fin de semana?".


No hay comentarios:

Publicar un comentario

no le pidas peras al olmo no le pidas peras al olmo